Autogestionar nuestra carrera artística

Autogestionar nuestra carrera artística

En nuestro reciente Encuentro Migrarte tuvimos el privilegio de contar con Nicolás Ravelli como participante principal. Durante esta sesión, su experiencia en autogestión nos ofreció una serie de claves prácticas y reflexiones que hoy pueden servirte como un apunte útil para impulsar tu carrera artística.

Estrategias esenciales para la autogestión artística

En nuestra conversación, pudimos entender que la autogestión va mucho más allá de una simple táctica puntual; es un proceso integral que abarca desde la planificación y promoción hasta la consolidación de una imagen y marca personal. Entre las estrategias más relevantes que compartió se encuentran:

  • Planificación y promoción: la organización de proyectos y la promoción eficaz de tu trabajo son fundamentales. Nicolás explicó cómo dedicar tiempo a estudiar convocatorias, preparar portafolios y estar listo para cada oportunidad puede marcar la diferencia.
  • Diversificación y reinvención: en un entorno artístico en constante cambio, diversificar tus experiencias es clave. Su trayectoria, que abarca desde dirigir óperas hasta gestionar festivales internacionales, demuestra la importancia de reinventarse y estar abierto a nuevos desafíos.
  • Construcción de redes y trabajo en equipo: alejándose del arquetipo del “genio solitario”, Nicolás subrayó que el éxito hoy se construye en red. Formar equipos, establecer alianzas y buscar el apoyo de otros profesionales es indispensable para afrontar proyectos ambiciosos.

“En el caos de lo artístico, lo burocrático es una tarea más. Tenemos que abrazar que también es parte de proceso. Eso me ha permitido acceder a otras oportunidades también. Lo erróneo sería pensar que mi trabajo es solamente lo artístico”.

Experiencias personales y lecciones aprendidas

Durante la charla, Nicolás compartió su experiencia al fundar y gestionar una compañía en Argentina, experiencia que le enseñó tanto los beneficios como los desafíos de liderar un proyecto artístico de manera autónoma. Aunque la experiencia resultó insostenible al tomar la decisión de migrar a España y finalmente cedió la compañía, cada paso le permitió aprender a valorar el trabajo en equipo y la importancia de delegar responsabilidades.

Su migración a España marcó otro hito: a través de un máster en dirección sinfónica y vocal, Nicolás fortaleció su capacidad de equilibrar la creatividad con la gestión burocrática, reconociendo que el manejo de lo administrativo es parte esencial del proceso artístico. Esta dualidad –trabajar en lo artístico y lo administrativo– es una de las claves que hoy comparte para que otros artistas logren transformar desafíos en oportunidades.

la importancia del autoconocimiento, de saber cuál es nuestra caja de herramientas. desde qué lugar nos paramos para llevar esa parte técnica formal hacia adelante.

Reflexiones para potenciar tu carrera

Uno de los mensajes más impactantes fue la invitación a revalorizar tu identidad y experiencia. La autogestión implica conocer tu “caja de herramientas” personal: lo que has aprendido, tus vivencias y la capacidad de adaptar tus estrategias a nuevos contextos culturales. Nicolás nos recordó que cada experiencia, ya sea en Argentina o en España, enriquece y potencia tu capacidad para contribuir de manera única al mundo artístico.

Este encuentro fue un recurso de inspiración para quienes buscan consolidar una carrera sólida y sostenible en el arte. Las herramientas y reflexiones compartidas sirven para recordar que, en el dinámico mundo de la autogestión, la clave está en la planificación, el trabajo en equipo y la continua búsqueda de la innovación.

“Tendemos a no querer ir a lo grande, como si lo grande nos fuera a superar. Tiempo para achicarnos vamos a tener siempre. Tenemos que ser muy ambiciosos, porque como personas que estamos al frente de algo eso también demuestra confianza y profesionalidad”.


¿Tienes alguna duda o quieres compartir tu experiencia sobre la autogestión en el arte? ¡Déjanos un comentario!

→ Además, si deseas profundizar en estos temas, te recomendamos el programa Autonomía Cultural (3ra Edición), que comienza el 22 de abril. Descubre más en este enlace.

Vender mi arte en el extranjero. ¿Qué tengo que tener en cuenta?

Vender mi arte en el extranjero. ¿Qué tengo que tener en cuenta?

El objetivo del Encuentro de junio fue conversar entre artistas sobre los aspectos importantes a considerar antes de lanzarse a la venta internacional de sus obras. 

La diversidad de disciplinas y lugares de origen es una de las cualidades más ricas de estos espacios. Por ello tuvimos la oportunidad de debatir y compartir ideas desde diferentes puntos de vista. 

Alexandre Caetano, 30 años en contextos internacionales

Alexandre, con una trayectoria de más de 30 años en teatro, producción, música, docencia universitaria y diseño gráfico, compartió su vasta experiencia en movilidad artística, habiendo trabajado en países como Cuba, Inglaterra, Alemania, Portugal, Rusia, Perú, Chile y Marruecos. 

Internacionalizar una obra significa entender y adaptarse a contextos culturales y legales diferentes sin perder nuestra identidad.

Investigación de Mercado

En primer lugar es importante preguntarnos por qué queremos llevar nuestro arte hacia afuera. Una idea muy generalizada en la conversación fue la de querer mejorar nuestra situación económica sin abandonar nuestro país de origen. Otra idea que surgió fue la de buscar la oportunidad de expandir nuestra propia cultura hacia otras fronteras.

De cualquier manera, sea cual sea nuestro objetivo, es importante empezar por una investigación de mercado, ya que eso nos ayudará a:

  • Tomar decisiones informadas
  • Adaptarnos a las expectativas locales sin perder la esencia propia de nuestro arte.
  • Identificar si hay una demanda real del producto o servicio artístico que ofrecemos y cómo podemos posicionarnos frente a la competencia.
  • Elaborar una estrategia de precios y comprender la disposición a pagar en mercados diferentes.

Alexandre destacó además la importancia de conocer muy bien el mercado: “No puedes vender si no tienes algún reconocimiento. La investigación de mercado te permite anticipar y adaptarte a un nuevo contexto.”

Alexandre apuntó que, en disciplinas como las artes plásticas o el cine, es posible exportar las obras sin necesidad de estar físicamente presentes. Sin embargo, en el teatro o la danza, la presencia del artista es esencial.

Internacionalizar una obra y al propio autor implica entender profundamente cómo se manejarán los pagos y las implicaciones fiscales en el país de destino. Si no podemos gestionar estos aspectos por nuestra cuenta, puede ser necesario contratar un agente.

También mencionó que es importante asegurarse de tener todos los documentos de identificación necesarios para abrir cuentas bancarias y manejar otros trámites complejos en el extranjero.

Por otro lado, es importante investigar si existen patrocinios o ayudas disponibles en el país de origen para poder emprender la internacionalización.

Derechos de Autor

¿Cuánto sabemos acerca de nuestros derechos? De más está decir que proteger nuestra propiedad intelectual nos ayudará a prevenir plagios y usos indebidos, no solo en nuestro país de origen sino también en el extranjero.

Tener el control sobre nuestra obra, decidir cómo y dónde se utiliza nos lleva también a una seguridad financiera asegurándonos de obtener la compensación adecuada por la exhibición, el uso o la reproducción de nuestro arte.

Conocer nuestros derechos refleja también seriedad y conciencia acerca de nuestra obra, nos permite posicionarnos en el mercado con confianza y respeto.

→ Recomendación: contactar con organizaciones como VEGAP puede brindarnos claridad para la gestión de derechos de autor de diversas disciplinas, incluso en diferentes países.

En relación a estos aspectos, Alexandre nos recomendó registrar nombres y patentes antes de internacionalizar una obra. En el caso de una obra teatral, por ejemplo, es importante filmarla y tener registros de derechos de autor. Tenemos la suerte de que, actualmente, disponemos de herramientas para documentar todo lo que hacemos desde el inicio, lo que ayuda a proteger nuestros derechos.

No debemos ser ingenuos y pensar que nuestra obra no puede ser plagiada. Documentar y registrar adecuadamente nuestras creaciones es una medida preventiva esencial para evitar el uso indebido y proteger nuestra propiedad intelectual.

“Registrar nombres y patentes antes de salir es crucial. Documentar todo lo que hacemos desde el inicio nos ayudará a proteger nuestros derechos.”

Aspectos Legales y Administrativos

En la autogestión artística hay algo que nos cuesta y es encarar los aspectos legales y administrativos de nuestra actividad. Si queremos pensarnos de forma internacional tener estos aspectos claros es imprescindible. Por eso, recomendamos poner foco en:

  • Contratos: pensar cómo vamos a establecer acuerdos de venta, licencias y comisiones de la forma más clara posible.
  • Permisos y certificados: tener claro cómo vamos a obtener los permisos necesarios y certificados de autenticidad para nuestras obras.
  • Impuestos y fiscalidad: conocer cómo las ventas internacionales van a impactar en nuestra fiscalidad personal, para evitarnos sustos y malos ratos.
  • Seguros: no olvidarse de presupuestar seguros de transporte y exhibición.
  • Logística y envíos: estudiar bien las distintas posibilidades para elegir un buen transporte, sobre todo tener en cuenta aquellas que nos aseguren un buen seguimiento de la obra. Buscar apoyo consular también puede ser una buena herramienta. 

En este campo, Alexandre mencionó que es crucial entender las personalidades jurídicas requeridas para cada convocatoria o país. Por otro lado, tener antecedentes en convocatorias o ventas internacionales puede ser muy beneficioso y fortalece nuestras candidaturas. En ese sentido, es importante también demostrar una actividad profesional relevante y considerar la posibilidad de contar con representantes. Debemos pensar en nuestra práctica artística como si fuera una empresa con un departamento administrativo capaz de gestionar estas cuestiones. 

“Pensarnos como una “empresa” con un departamento administrativo puede marcar la diferencia.”

Hasta aquí todas las recomendaciones que pudimos recoger durante el Encuentro del mes de junio. Esperamos que te haya servido y que puedas implementar algunas de estas herramientas para poder seguir creciendo en tu arte.

→ Si quieres sumarte al próximo Encuentro te dejamos AQUÍ el link de inscripción.

BONUS! Alexandre nos ha proporcionado un documento en donde reunió algunas de las convocatorias más interesantes a nivel iberoamericano. Déjanos un comentario abajo contándonos contándonos qué te pareció el Encuentro y/o la información que te compartimos en esta publicación y te enviaremos el link de acceso para que puedas descargarlo 🙂

FRANCO CONTI. Músico / Productor Ejecutivo y musical.

FRANCO CONTI. Músico / Productor Ejecutivo y musical.

Con la música como bandera, Franco Conti nos motiva a pensar en el poder transformador del arte.

Nacido en la ciudad argentina de Mendoza y embarcado en un recorrido musical desde temprana edad, Franco fusiona diferentes pedagogías musicales, no solo en la guitarra, sino también en una variedad de instrumentos y en la producción musical.

Sabemos que tu perfil es diverso y tus estudios de formación estuvieron ligados a otros ámbitos. ¿Cómo descubriste esta pasión por la música y que querías dedicarte a ella? ¿Cuáles son tus motivaciones artísticas?

Mi pasión por la música la “descubrí” de niño, creo que es algo inherente a mi ser. Siento una atracción muy fuerte hacia ella imposible de manifestar en palabras y desde mis primeros recuerdos hasta el presente me acompaña.

Desde los 8 años le dediqué tiempo sin otro objetivo que el de tocar, hasta que en un momento de viajes y epifanías a mis 23 años visualicé claramente que tenía algo de valor para compartir con los demás y así cobró sentido el querer profesionalizarme, es decir el juego y mi propia pulsión, sin darme cuenta habían construido algo que para mí es muy valioso y serio.

Mis motivaciones artísticas (extrapolando lo artístico a lo global no sólo a la música) se pueden dividir en 2: una es la intrínseca, la cual me acompaña desde el principio y mediante ella he formado mi realidad, desarrollado mis pensamientos, mi sentir y las proyecciones de mi vida. La otra son las personas que me escuchan y conectan con mi trabajo, con las cuales estaré eternamente agradecido porque me hicieron notar que tengo algo para dar y son la razón por la cuál tomé la decisión de trabajar no sólo en lo intrínseco (individual), sino también, agregar el trabajo de sacar eso hacia afuera de la mejor manera posible.

Estuviste viajando y presentándote en diferentes lugares  ¿Cómo fue esta aventura?

Si, como comentaba antes, descubrí el oficio mientras viajaba y estuve algunos años viviendo en diferentes países, trabajando con música y cocina. La cocina para mí es otro trabajo que su fin es un placer como también estar en contacto con lo primitivo de mi ser (oler, ver, tocar, cocinar, comer) sumado a eso era mucho más fácil conseguir dinero con esta actividad la cual me gusta pero estaba seguro que quería trabajar en la música, por lo que de a poco me las fui ingeniando para hacer cada vez más música y menos cocina (profesionalmente), fue así que empecé a establecer un plan a largo plazo, educándome en producción musical, grabación, mezcla, producción ejecutiva, realizando composiciones y tocando.

El clímax de tocar y producir fue hacer una gira autogestionada por Argentina, donde presenté mi 1er álbum “Yendo” con 30 shows en 12 provincias. Al finalizar la misma comenzamos la productora “Medusa” con mi gran amigo y colega Lucas Martín.

La aventura de estos viajes fue la posibilidad de experimentar desde un montón de lugares diferentes, tocando en la calle, pidiendo permiso en restaurantes, en el bondi, en bares, clubes, escenarios, teatros, centros culturales, producciones íntimas, en la playa, la montaña, el río, el desierto, la selva, plena ciudad, etc. y con personas diferentes.

“Claro está que el contenido de la música que hago (como el de mi ser) está plagado de estos viajes, de sus experiencias, sus sonidos, floras, faunas, culturas, personas que no olvidaré y la intensidad que conlleva el ser nómade”.

Migrarte es una plataforma de oportunidades para artistas. ¿Cómo crees que migrarte puede ayudar a vivir ese tipo de experiencias? Ya que eres parte de la comunidad, cuéntanos: ¿Qué fue lo que más te gustó de la plataforma? 

Lo que más me gusta de la plataforma es la red de contactos, es su motor más fuerte y mediante estos se pueden hacer realidad un montón de experiencias y proyectos. Creo que la información que brindan también suma a que las personas puedan tener este tipo de experiencias, ya que suavizan ciertos temores que algunxs puedan tener y desbloquean trabas de perspectivas ya sea leyendo las experiencias de otrxs o desarrollando las herramientas de los cursos. 

¿Tienes algún proyecto vigente para compartirnos y que te interese que la comunidad sepa? Queremos difundirlo!

Actualmente estamos trabajando con Lucas en Medusa, la cual es una empresa de servicios artísticos compuesta por 3 unidades: Medusa banda (Lucas y yo + sesionistas), Medusa productora de eventos y Medusa productora artística (producción musical y ejecutiva).

Actualmente las 3 unidades se encuentran en funcionamiento: estamos presentándonos en vivo, el 12 de octubre realizaremos nuestro 4to evento en Mendoza con artistas de CABA y del sur de Argentina y estamos produciendo, grabando y mezclando álbums de musicxs mendocinxs.

En Abril del 2024 nos vamos con Medusa a México para mostrar nuestro trabajo y  generar relaciones con el entorno artístico Mexicano, la idea es internacionalizar la empresa utilizando nuestros conocimientos y experiencias tanto en el sector artístico y empresarial como en el ser nómades.

La música siempre ha sido más que una pasión para Franco; es su canal de vida para interpretar, comunicar y conectar con el mundo que lo rodea. Durante sus viajes, Franco adquirió una profunda conciencia de que la música lleva consigo un mensaje que trasciende su propia individualidad. ¡Gracias Franco por compartir tus aprendizajes a través de esta entrevista para la comunidad Migrarte!

Lee otras entrevistas de artistas y sus experiencias por el mundo

Sol Martínez, artista plástica, pintora, dibujante y muralista.

“La experiencia de vivir, estudiar y conocer gente nueva en ese ámbito es increíble. Éramos casi 70 personas, todos de diferentes países y otros luagres de España. Todos con un interés en común, el de la ilustración, el arte, el dibujo.”

Cultivando la Autogestión y las Redes en el Ámbito Cultural

Cultivando la Autogestión y las Redes en el Ámbito Cultural

En el mundo del arte y la cultura, la autogestión y la creación de redes son dos aspectos fundamentales para el crecimiento y el desarrollo profesional. En este artículo, exploraremos la importancia de la autogestión y cómo generar y nutrir redes puede abrir puertas y brindar oportunidades invaluables a los artistas y profesionales culturales.

  1. La Autogestión: Sembrando el Propio Camino La autogestión implica asumir la responsabilidad de dirigir y promover nuestra propia carrera artística. Al tomar las riendas de nuestro desarrollo, podemos controlar nuestra narrativa, explorar nuevas oportunidades y no depender exclusivamente de terceros para avanzar. La autogestión nos permite:
    • Definir nuestros objetivos y metas artísticas.
    • Planificar estratégicamente nuestro crecimiento y desarrollo profesional.
    • Buscar y crear oportunidades de exposición y colaboración.
    • Administrar nuestras finanzas y recursos de manera eficiente.
    • Cultivar nuestra marca personal y establecer una presencia en línea sólida.
  2. Tejiendo Redes Culturales: Conectando con el Mundo del Arte La creación de redes en el ámbito cultural es esencial para establecer relaciones significativas, colaborar con otros profesionales y ampliar nuestras perspectivas. ¡Por y para esto existe MIGRARTE, PARA TEJER REDES.
    Al tejer redes, podemos:

    • Conectar con artistas, gestores culturales, curadores y profesionales relacionados en nuestro campo.
    • Compartir experiencias, conocimientos y recursos.
    • Descubrir nuevas oportunidades de exhibición, residencias artísticas y programas de financiamiento.
    • Obtener retroalimentación valiosa sobre nuestro trabajo.
    • Inspirarnos y enriquecernos al interactuar con personas de diferentes trayectorias y perspectivas.
  3. Beneficios Mutuos: Sinergia en la Comunidad Cultural La autogestión y la creación de redes no solo benefician al artista individual, sino que también fortalecen a la comunidad cultural en su conjunto. Al compartir recursos, ideas y apoyarnos mutuamente, podemos:
    • Fomentar la colaboración y el intercambio de conocimientos entre artistas y profesionales culturales.
    • Generar proyectos colectivos y eventos enriquecedores.
    • Crear un ecosistema cultural vibrante y sostenible.
    • Promover el acceso equitativo a oportunidades y recursos en el ámbito artístico.
    • Contribuir al crecimiento y la diversidad de la escena cultural.En un mundo en constante cambio y transformación, la autogestión y la creación de redes se vuelven aún más cruciales para el éxito y el desarrollo de los artistas y profesionales culturales. Al asumir el control de nuestras carreras y establecer conexiones significativas, podemos trazar nuestro propio camino y cultivar un entorno cultural próspero y colaborativo.
      Sabemos que hay otras preocupaciones, en torno a lo economico, en torno a conseguir apoyos, financiamiento, (para sumar aqui te proponemos que leas este post QUE FINANCIARTE no sea tan inmenso, )
      pero es importante que consideres que la CULTURA se genera en Red. por lo que comenzar por generarlas ya es una gran oportunidad.
      ¡No subestimes el poder de la autogestión y la construcción de redes en tu viaje artístico!

      ¡Cultiva tu autogestión y expande tus redes para cosechar el éxito en el ámbito cultural!

Julieta Reta Cardinali

Julieta Reta Cardinali

Gestora Cultural

Córdoba, Argentina

Proyecto de ruta turística y cultural-La vuelta al mundo en 80 cafés

Proyecto de ruta turística y cultural-La vuelta al mundo en 80 cafés

Fernando Franjo nos cuenta sobre un proyecto que investiga cafés que tienen historia y los une en una propuesta cultural y turística fascinante. Historiador y periodista capitaliza muy bien sus conocimientos para ir más allá de las referencias turísticas sociales y encontrar en localidades los Cafés que hacen al sentido de pertenencia y la historia de cada lugar. 

Fernando, cuéntanos sobre café históricos. Nos intriga mucho este proyecto y conocer en profundidad de qué trata y su relación con la cultura. 

Como historiador y periodista me he interesado desde hace años por el estudio de los Cafés históricos como algo más que un local precedido por un recorrido cronológico o por un decorado fastuoso, sino como una referencia cultural y social y de cada una de las ciudades en las que se encuentran porque Café y ciudad están estrechamente enlazados. 

Comencé a investigar y a viajar en clave de Café entendiendo el Café como una especie de etapa de una ruta turística y también cultural.. Pero creo que lo fundamental es definir los términos de Café histórico. Intento escapar de las definiciones convencionales. No quiero restringir este concepto a aquellos locales monumentales que a todos nos suenan por reportajes a todo color en revistas y muchos de los cuales se han convertido en un local turístico masificado en grandes ciudades. En muchas ocasiones, el calificativo histórico es equívoco. No deberíamos ceñirnos a los Cafés que juegan en otra categoría (Majestic, en Porto;  Greco en Roma: New York, Budapest. Tortoni, Buenos Aires). Yo intento ampliar esta definición a aquellos establecimientos que tienen historia en sí mismos, que son referencia social de cada una de sus ciudades o localidades, que además presumen de ellos. Podemos viajar por todo el mundo y encontrar Cafés que nos ayudarán a comprender el significado, los atractivos y narrar la historia de cada ciudad, en definitiva, su patrimonio. Pensemos que un Café que abrió sus puertas hace cien o ciento cincuenta años, es un reflejo fiel de su entorno y de su ciudad y ha pasado por encima de todos sus cambios políticos, sociales, urbanísticos, etc.      

Pero el Café histórico no nace como tal, no abre sus puertas con la intención de entrar a formar parte de la historia. Recibe esa categoría con el paso de los años y de todos aquellos que lo visitan y frecuentan, tanto aquellas personalidades individuales que han pasado con su nombre y apellido a la historia (escritores, políticos, artistas etc..) como por los miles y miles de personas anónimas que los han frecuentado o visitado y han traído su legado hasta la actualidad. Todos ellos, unos y otros, son los que escriben la historia. 

Ahora en los tiempos que vivimos, todo es un poco más complicado. Un Café no puede vivir de la nostalgia y de su nombre o del hecho de haberse convertido en una marca registrada.  Los tiempos han cambiado y el siglo XXI tiene nuevas exigencias pero los Cafés siguen siendo puntos de encuentro de nuestra sociedad, es verdad que más de conversaciones que de tertulias y también más de imagen y tecnología que de letra escrita.  

El Café histórico de la actualidad debe asumir una serie de desafíos que pasan por conjugar la modernidad, las pautas de calidad en producto y servicio, el respeto a la historia y patrimonio que los preceden y el siempre difícil reto de conjugar la presencia autóctona y el turismo masivo en el que en tantas ocasiones se ven inmersos muchos establecimientos, una opción tan legítima como en ocasiones necesaria para su continuidad, y que sería objeto de un largo debate. 

En este sentido, creo que es extraordinariamente importante a día de hoy la gestión y la actividad cultural y en especial en este momento, que puede convertir cada uno de estos recintos en locales diferenciados y con propuestas experienciales que van más allá de la cultura del selfie y la invisibilidad que tantas veces los define.      

Lo que nos cuentas cobra mucho sentido en relación a la cultura. Tal como dices en la actualidad hay una “nueva cultura” del selfie que borronea un poco el ritual del encuentro como actividad cultural dónde los Cafes tienen un gran protagonismo. Claramente tu recorrido y experiencia te permite ver un poco más allá para poder hacer el análisis y capitalizarlo en tan lindo proyecto. Ahora, sabemos que tienes un amplio recorrido en prensa y radio. Nos gustaría que nos cuentes sobre alguna experiencia en particular de esos ámbitos ¿Qué puedes contarnos de esa experiencia enriquecedora y el rol que ocupaste? 

Durante más de veinticinco años he trabajado en prensa escrita fundamentalmente en la parcela cultural, con especial dedicación a la música. Sobre tema sobre también trabajé en radio durante años. He tenido la fortuna de reflejar en mis páginas y en mi trayectoria radiofónica durante toda mi trayectoria entrevistas con grandes músicos de géneros como folk, rock o jazz, actores, escritores, etc. Pero también he trabajado mucho en patrimonio, cultura y turismo, siempre en mi ciudad y gran capital de la cultura Santiago de Compostela. Esto último ha estado siempre en relación con mi formación inicial de historiador, que de una u otra forma siempre ha guiado mi trayectoria periodística. Esto fue, sin duda, lo que motivó que empezase a interesarme por el mundo de los Cafés que surgió como un tema puntual pero que me apasionó y sobre él he escrito dos libros y numerosas publicaciones en prensa y radio con el título La vuelta al mundo en 80 cafés 

Paralelamente a mi trabajo periodístico, completé mis estudios de gestión cultural e inicié hace algunos años mi actividad como gestor y comisario de exposiciones y en la actualidad compagino esta parcela con proyectos de comunicación y marketing.    

Nos encantaría que sumes tu proyecto a la plataforma. Migrarte es una plataforma de intercambio para artistas y diseñadores, se creó para facilitar la conexión entre artistas y la participación en proyectos culturales colaborativos, residencias artísticas, intercambios, proyectos artísticos. ¿Crees que MIGRARTE puede ayudar a vivir ese tipo de experiencias ? ¿Por qué?

Por supuesto que sí. Como decía, en el caso concreto de los Cafés y en especial de loe entornos avalados por la historia y el patrimonio es extraordinariamente importante el componente cultural. Un proyecto en el que trabajamos actualmente con el nombre de Cafés no Camiño (Cafés en el Camino) y sigue una ruta por varios cafés centenarios del Camino de Santiago entre Portugal y Galicia. En este proyecto, cada uno de los locales acoge una serie de veladas protagonizadas por distintos espectáculos que complementan la habitual oferta musical: live painting, teatro, monólogos, magia, circo, etc. Yo he sido testigo del paso de intérpretes locales que comenzaron en un pequeño escenario de Café y que hoy llenan pabellones con miles de asistentes en sus conciertos. 

Plataformas como Migrarte permiten, sin duda, visibilizar y conectar a gestores culturales, artistas y casi lo más importante y complicado: a los responsables de los locales y también a las instituciones de la viabilidad de proyectos colaborativos en estos escenarios. Creo que es una vía de futuro que es necesario abordar.   

Julieta Reta Cardinali

Julieta Reta Cardinali

Gestora Cultural

Viajera, inquieta

Fernando Franjo

Fernando Franjo

Historiador y periodista

Viajero en ruta y en el papel.

Hacer más con menos en el arte

Hacer más con menos en el arte

FrustARTE

Una frustración constante a la hora de crear es el presupuesto. Vivimos pensando en cosas que “podríamos” crear si “tuviéramos” ese presupuesto. Tenemos un doctorado en hacer más con menos, encontrando en nuestra creatividad alternativas que reduzcan los números o que no sumen.

Lamentablemente muchas veces la calidad de los proyectos se limita. Cómo si pensar en algunas ideas fuesen pretensiones de millonarios. ¿Te pasa? La relación que los/las artistas tenemos con las oportunidades y el dinero tiene un antecedente que es todo lo contrario; en la antigüedad ser parte del mercado del arte era símbolo de poder político, económico y social.

 Los sugar daddy del arte

 

El arte antiguo era sustentado por instituciones de gran poder como la iglesia. De esta forma existía el sistema de mecenazgo que consistía en hacer pedidos de obras por encargo proporcionando un patrocinio que garantizaba protección a la actividad artística y por lo tanto condiciones óptimas para su desarrollo logrando su ejecución. En la Edad Media comenzó a obrar el sistema de mecenazgo civil, de manera tal que familias aristocráticas ligadas a la política y movimientos sociales pasaron a tomar esta acción como una convención. Tener un mecenas garantizaba sumarte a un círculo de fama y prestigio con la seguridad de tener lo que hoy sería un ingreso fijo. Por otro lado el mecenazgo se exacerbó en la época barroca, momento en el cual había un afán por acumular y tenerlo todo ampliando esta acción al arte decorativo.  Como todo tiene su lado positivo y negativo, en otro lugar;  la obra a representar era arbitraria y a gusto de quien la pagaba, pues se realizaba a pedido.

Luego; surgió un movimiento del arte accesible que democratizó el arte permitiendo que todas las personas accedan a él y esto fue cuando en la edad contemporánea otro tipo de instituciones comenzaron a apostar por artistas prometedores en formación patrocinando su trabajo y exponiendo en grandes galerías. Actualmente aún existen organizaciones, asociaciones, empresas que funcionan de mecenas como también nuevas alternativas de financiamiento. 

¿Pero entonces que pasó?

El paso del tiempo nos llevo (a nosotros/as artistas) a dos problemáticas principales:

a- Depender de un dinero de contención que no sabemos conseguir, calcular,  ni cuánto debería ser, que hoy se puede ver representada por el estado con sus con subsidios y que por lo tanto influye directamente cómo es la economía del país y la importancia del arte para el gobierno de turno. y; 

b-Depender del reconocimiento social en cuanto al valor monetario de nuestro arte situación que también margina el “Arte Popular” como de bajo presupuesto.

Muy lindo todo, pero ¿De qué vivimos los/las artistas?

Por empezar, es importante entender como viene la línea de nuestra relación con el dinero que provocó que hoy en día vivamos de dependencias de reconocimiento del otro/a e intentemos encontrar un punto medio. Estamos de acuerdo que arte debe ser accesible y para todas las personas pero por otro lado tenemos que hacer malabares para lograrlo y ahí es cuando caemos en vivir haciendo MAS CON MENOS y muchas veces esto nos impide hacer saltos o pasos creativos mas grandes. ¿Cuál es la propuesta? Amigarnos con el dinero, la economía del arte y nociones claves que nos permitirán tener herramientas para gestionar y administrar nuestro quehacer. 

¿Será momento de que quienes nos dedicamos a esto encontremos un punto medio? ¿Qué opciones ves? Depender de los subsidios puede ser contraproducente, necesitamos entender un modelo de negocio, cuando sale nuestra hora de trabajo en relación creación de obra como de contenido. No te preocupes, esta estudiado que muy pocos espacios de formación artística aportan material afín. También es de público conocimiento que muchos/as artistas sólo quieren dedicarse a crear, no les interesa  hacer números. Es ahí entonces cuando debes reflexionar sobre el arte colaborativo. Aunque pintes, entrenes, dibujes, cantes en soledad, si para dar a conocer tu arte o venderlo necesitas de alguien más, entonces no es arte solitario.  

Lograr que el arte prospere como actividad económica y se posiciones como mercado redituable no logrará que algunos/as pocos/as ganen dinero sino que permitirá acompañar la identidad cultural, social e intelectual en masas logrando también acompañar lugares más vulnerables visibilizando el arte colectivo.